Pozo en la Calle Colón (conocido como el de la Calle las Peñas) |
En el siglo XVII, en 1643, el Licenciado Joseph García Puertanueva nos cuenta en su manuscrito que las aguas de Consuegra eran dulces y que cada casa tenía un pozo, en ocasiones incluso dos. Decía contar en su término y contornos con unos manantiales de aguas singulares, especialmente uno, que abastecía a la "gente principal", llamado de los Terrados. Gentes no sólo de Consuegra, sino de otras localidades acudían a esta fuente para aliviar sus achaques y cuenta la anécdota de que en tiempos de la dominación romana se utilizaba por todo el imperio esta expresión- " más os quería ver entregados a las sabrosas aguas de Consabura, que no a los dulces vinos de Tarraco".
http://circuloculturalconsaburense.blogspot.com.es/2013/07/en-abrevadero-que-anoraba-ser-canal-del.html
http://circuloculturalconsaburense.blogspot.com.es/2013/07/y-los-romanos-trajeron-el-agua.html
Estanques Romanos (La Poza) Col. Oficina de Turismo |
En 1894, con motivo del estudio realizado para llevar agua potable a la villa de Consuegra, el ingeniero D. Gonzalo Aguirre detalla manantiales y otros datos interesantes del paso del agua por Consuegra. Las aguas de los pozos de la villa eran descritas como gruesas, salobres y de poca calidad, compuestas de sales a base de cal y magnesia, en las cuales el jabón no hacía espuma y se coagulaba formando grumos. Se cita en este documento que era habitual en Consuegra ver por las calles vendedores de aguas de manantiales lejanos, como las de la fuente del Almendro, como prueba de la necesidad de abastecer a la localidad con agua de calidad para su consumo. Se determinó colocar pozos vecinales, en la mayor parte de los casos aprovechando un pozo natural o corriente subterránea de agua, como fue el caso del pozo de la Plaza de la Constitución (hoy de España), el de la Plaza de San Juan y el de las Carmelitas, en la Puerta de Madridejos, frente al Cuartel. Al hablarnos del sistema de alcantarillado previsto, el documento nos desvela que el subsuelo de Consuegra y sus alrededores está compuesto de roca caliza. La cara norte de la cuesta, en las canteras donde se iba a asentar el depósito de abastecimiento, también dice estar compuesta de este tipo de roca y habla que existía en esas canteras una cueva con agua subterránea. La roca caliza es permeable, permitiendo que se filtre agua al subsuelo, agua cargada de ácido carbónico, que con el paso de siglos de filtraciones disuelve poco a poco la roca caliza por donde discurre, formándose grandes cavidades por donde circulan verdaderos ríos subterráneos. Los ingenieros encargados de este proyecto afirmaban que había aguas subterráneas que corrían de manera natural bajo las rocas sobre las que se asienta Consuegra, dato contrastado al explorar pozos particulares que daban acceso a cuevas que se perdían bajo sus pies.
Desgranaremos en este post los pozos y fuentes de antaño más relevantes de nuestra localidad. Muchos de ellos guardan anécdotas, secretos, confidencias y retazos de Consuegra que no debemos olvidar.
Comenzamos nuestro viaje por el pozo de la calle Las Peñas (hoy calle Colón), uno de los más usados en tiempos. Construido aprovechando las vetas de las rocas que forman la cuesta, por donde manaba agua de buena calidad, a unos 6 o 7 metros de profundidad. La gente no solía usar el carrillo para extraer el agua, sino que directamente arrastraban el cubo por la roca, en la que se habían marcado tras el paso del tiempo las huellas del roce de las sogas. El pozo actualmente está condenado, pero se puede ver, como muestran las imágenes.
Cól. Oficina Turismo Consuegra |
http://circuloculturalconsaburense.blogspot.com.es/2015/04/la-leyenda-de-la-cuarta-noche.html
Solar donde se ubicaba el Pozo del Ayuntamiento |
http://circuloculturalconsaburense.blogspot.com.es/2013/12/el-origen-del-toponimo-consuegra.html
No hay que confundir las cuevas naturales, frecuentes en terrenos calizos, con las característica frequeras para conservar los alimentos en el siglo pasado, ni con posibles restos de cloacas romanas o construcciones de épocas pasadas. En la carretera de Urda, esquina con Diego Rodríguez de Vivar, se ubicaba el Pozo llamado de la Tía Sara. Siguiendo el rastro de estos manantiales naturales podemos llegar hasta el suministrador de todos ellos, un pozo descubierto en 1962 en la actual Ronda de los Molinos, cuyos terrenos fueron comprados por el Ayuntamiento a sus propietarios por la gran cantidad de agua que manaba de él. Fue tal la cantidad de agua que se extrajo que al cabo de cierto tiempo se secó, secándose con él los pozos que de él se surtían. Existe la creencia de que estos pozos a su vez dependían del manantial de los Estanques Romanos, en La Poza, de agua abundante y de buena calidad.
La fuente Bicaco, desvelados sus secretos gracias a la excavación realizada en el sondeo uno, en el cerro de la Cuesta, próxima al molino Bolero. Por lo visto, en épocas anteriores, más húmedas que la actual, al llover, se embalsaba el agua en esta estructura y manaba poco a poco por debajo. Curioso teniendo en cuenta que se trata de una estructura hidráulica.
Próximo a las canteras de Sara, fácilmente reconocibles actualmente porque parecen un enorme "bocado" en la cuesta, algo más arriba, en ocasiones, aparecía otro manantial entre dos grandes piedras, conocido como la fuente de la Rendija.
Antes de llegar a la cantera de Sara, en una más pequeña, se localiza la entrada a una cueva con rocas kársticas alrededor.
Detalle piedra caliza en la trampilla |
Mas cuevas que se conocieran eran las de la cantera conocida como "de Guarrama", bajo el actual vertedero y las Cuevas de "La Arena", a las que se subía por el Portachuelo y la Cruz Verde, ambas en el cerro, y cuevas míticas en el casco como las de las casa de la Tercia o las de la calle del Pozo de la Nieve, que se pueden adivinar desde la calle:
Bajo nuestro Castillo también hay cuevas, en la zona del jardín, en el espolón de la barbacana y frente a la parte trasera del torreón de los escudos, ambas cegadas.
Crónicas describen un manantial o fuente de aguas cristalinas que manaba bajo el castillo. ¿Pudo corresponder a la oquedad que se aprecia en la imagen inferior?
Posiblemente todas ellas conectadas con esta otra cueva de la pegada a los muros del castillo
...Tesoros que corren bajo nuestros pies.
Elias y Angeles Anaya
que grandes sois!
ResponderEliminarMuchas gracias por seguirnos y apreciar nuestro trabajo. Vuestra valoración es un estímulo para continuar.
ResponderEliminarAnimo, asi se fomenta la cultura de un pueblo. gracias
ResponderEliminarUn buen trabajo que merece ser aplaudido. Gracias por el esfuerzo y la pulcritud en la presentación
ResponderEliminarGracias por seguirnos! Sois nuestro principal estimulo
EliminarBuenas, recuerdo de chaval que había unas cuevas que me parece recordar estaban situadas en alguna de las antiguas canteras, situadas en la falda de cerro y recuerdo que pasábamos gateando unos cuantos metros y una vez dentro nos poníamos de pie y cortábamos "estalactitas" y "estalacmitas" ?, y nunca llegamos a recorrerlas por miedo a que hubiera algún "monstruo", pero daba la sensación de que esas cuevas llevaban a algún sitio. ¿Sabéis algo de dichas cuevas? y si es así, ¿estaban comunicadas con algún lugar?. Gracias.
ResponderEliminarPoco hay que comentar ya está bien descrita toda esa información. En mi juventud teníamos muchos problemas para dar de beber a los ganados en años de sequía los pozos no suministraban suficiente agua y se secaban . Para el consumo humano había que acarrear el agua desde muy lejos nos ayudabamos con las bestias que aparejadas convenientemente se transportaban cuatro cántaros hasta llenar las tinajas en los domicilios .
ResponderEliminar